Voto de castigo

Emiliano Gonzaga

Que el partido en el gobierno a nivel federal no merezca la mayoría en la cámara de diputados, lo cual creo firmemente, no tiene por qué ser un cheque en blanco para la continuidad de los partidos gobernantes en lo local, sobre todo en los casos de aquellos que buscan la reelección.

Partir del supuesto de que todas y todos los candidatos de MORENA son malos y sus propuestas de gobierno desatendibles por ser de MORENA es irracional. Tan irracional como haber votado por ya saben quién en 2018 por estar hasta la madre del PRIAN y darle carro completo.

Cómodamente, miembros de la comentocracia queretana hablan de “Que sus intereses locales no los nublen” y voten en contra de MORENA, entiendo el llamado y la preocupación si se trata de la mayoría en la cámara de diputados, porque estoy a favor de mayores contrapesos al ejecutivo. Pero esos contrapesos que la comentocracia exige en lo federal son igualmente necesarios en lo local.

Las cómodas mayorías suelen ser buenas solamente para el partido gobernante, la oposición y, sobre todo, los ciudadanos, suelen padecer estos escenarios porque vuelven soberbios a los tomadores de decisiones.

El propio ejecutivo federal es muestra clara de lo que digo, su soberbia y necedad se potencian porque sabe que cuenta con el control del legislativo. Los llamados a votar todo en contra de MORENA en lo local son irracionales porque lo que nos están pidiendo es repetir el patrón funesto que ya tenemos a nivel federal.

Denle todo el control de la representación popular y el ejercicio de gobierno a un solo partido. Por qué deberíamos creer que el carro completo que apoyan en lo local y critican en lo federal no va a resultar en la soberbia del grupo político ganador.

La postura maniquea de que todo lo malo hoy está en MORENA, es tan peligrosa como haber asumido en 2018 que todo lo bueno estaba con Obrador. Lo que nos piden los “analistas” por cierto muy proclives al estatus quo, es que, sin importar su desempeño e incumplimiento de promesas, volvamos a votar por el mismo partido y los mismos gobernantes que defraudaron a la ciudadanía y están buscando nuevamente su apoyo.

Caso emblemático en lo local es el intento de reelección en la capital queretana. El abanderado del PAN no cumplió con dos de sus propuestas eje de hace tres años. La mitad del tráfico y el doble de seguridad, falló en ambas, pero hay que darle otra oportunidad nada más porque NO es MORENA, nada importa más que evitar que gane el partido del presidente.

Ese es un falso dilema. Los intereses locales de los votantes pueden ser más racionales que el deseo de los “analistas” o el independiente más dependiente que ya salió a hacer campaña abierta a favor de la reelección de Nava. Pueden votar en contra de la mayoría legislativa en lo federal y establecer los mismos contrapesos en lo local, tanto en la cámara de diputados como en los gobiernos municipales.

No se trata de pasar de un partido hegemónico a otro, se trata de apostar por la pluralidad política que fuerce acuerdos amplios y más representativos, se trata de no convertirnos en cómplices de gobernantes ineficientes y diputados convenencieros que hoy piden tu voto para hacer todo aquello que pudieron hacer por ti y por Querétaro los últimos tres años y no hicieron.

Merecemos más que eso y el voto de castigo que merece Obrador en lo federal, también lo merecen aquellos que han fallado en lo local. Un votante inteligente entiende eso, por más que los “analistas” acomodaticios quieran que ganen los que ellos quieren.

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