“En medio de la adversidad generada por la pandemia del Covid-19, que se acompaña de la depresión y la ansiedad, así como del aumento de la violencia contra las mujeres, la discriminación hacia las juventudes, hacia la diversidad sexual y otros grupos en situación de vulnerabilidad en el país. Las y los jóvenes nos recuerdan la importancia de fortalecer la salud mental, a través de la empatía, la solidaridad y el aprendizaje de la resiliencia, que es la capacidad de hacer frente a las distintas adversidades de la vida, porque permite desarrollar conductas positivas ante la incertidumbre, el miedo, el estrés, las amenazas o algún conflicto”.
Así lo manifestó Manuel Edmundo Ramos Gutiérrez, Presidente de SOS Discriminación Internacional Querétaro, durante la conferencia virtual “Juventudes Resilientes y Derechos Humanos”, que impartió en la Universidad de Londres, Campus Querétaro, en el marco del “Día Mundial de la Salud Mental” que se conmemorará el próximo 10 de octubre, con la finalidad de sensibilizar sobre los problemas relacionados con la salud mental y unir esfuerzos para ayudar a mejorarla.
Durante sus intervenciones las y los estudiantes coincidieron con Ramos Gutiérrez, sobre la importancia de contar con herramientas que les permita desarrollarse como personas resilientes para reconstruirse de forma positiva como seres humanos, para superar la violencia normalizada culturalmente, partiendo del respeto a la dignidad humana que protegen los derechos constitucionales con fundamento en los derechos humanos.
Finalmente, el presidente de SOS Discriminación Internacional Querétaro, celebró que las instituciones públicas y privadas de educación superior cómo la Universidad de Londres en la entidad, estén fortaleciendo sus planes de estudio con actividades para fortalecer la salud mental positiva y resiliencia con perspectiva de género, así como de derechos humanos.
“Pues de esta manera las instancias educativas contribuyen a que los seres humanos podamos desarrollar el conocimiento de uno/a mismo/a. Así como fortalecer el autoestima, aprender a manejar las emociones, generando el desarrollo de relaciones saludables y evitar el aumento de las relaciones tóxicas, codependientes o de violencia”. Concluyó Ramos Gutiérrez.