Conscientes de que el embarazo adolescente es un problema que afecta a Xochimilco, Ana Fernanda y Ricardo decidieron participar en una convocatoria impulsada por UNFPA México y su socio implementador Petit Fils, A.C. para transformar esta realidad a través del arte y la comunicación.
Ambos viven en la zona de la montaña de Xochimilco, al sur de la Ciudad de México. Se trata de una alcaldía que tiene una de las tasas más altas en embarazo adolescente: 81 embarazos por cada 1,000 adolescentes, el doble de la media mundial de 40 embarazos por cada 1,000 adolescentes, de acuerdo con UNFPA México. Esta situación limita sus derechos humanos, entre ellos, el acceso a un empleo digno y provoca una mayor deserción escolar, sobre todo para las mujeres. Además, contribuye al aumento de la pobreza y de la violencia contra mujeres, niñas y adolescentes, e, incluso, a una mayor mortalidad de mujeres a temprana edad, entre otros problemas.
La convicción de jóvenes como Ana Fernanda Fabila, de 18 años, y de Ricardo González, 17, para cambiar esta situación, es ejemplar. Ambos decidieron actuar concursando en una convocatoria lanzada por UNFPA junto a la asociación civil de Xochimilco de nombre “Petit Fils”, para realizar un mural que promueva los derechos sexuales y reproductivos en su localidad, además de brindar información y herramientas clave para que las juventudes puedan trazar y disfrutar de un proyecto de vida. Su propuesta resultó ganadora de entre más de 55 proyectos de 83 participantes.
“A tu manera pero cuídate… Estamos muy chicos para cuidar kitty bebés”, se puede leer en su mural recién pintado en Xochimilco, el cual cuenta con teléfonos para brindar asistencia inmediata y oportuna de violencia de género, atención psicológica y denuncias en contra de la vulneración de los derechos humanos, así como acceso a los Servicios Amigables de Salud Sexual y Reproductiva para juventudes, ubicados en los Centros de Salud de Xochimilco
“¡No debes tener miedo a cuidar tu sexualidad!”, exhorta Ricardo, quien está muy orgulloso de contribuir con este tipo de mensajes en una comunidad donde apenas hace algunos años era muy difícil hablar de cómo cuidar de la salud sexual y reproductiva, para prevenir embarazos a temprana edad y para evitar adquirir infecciones de transmisión sexual, incluyendo el VIH.
“Hablar de sexo (en nuestra adolescencia) era malo. Nunca nos dijeron que nos teníamos que cuidar y que había miles de formas de cómo cuidarnos. Para nosotras nunca hubo este tipo de información”, comenta Ana Lilia Flores, mamá de Ana Fernanda, quien aplaude este tipo de iniciativas y campañas informativas no sólo porque involucra a las juventudes y a sus familias, sino porque tienen el potencial de salvarle la vida a muchas niñas y adolescentes.
“Muchas niñas mueren porque no tienen la información necesaria”, indica Ana Lilia, de 39 años. “Se meten a sitios (web o redes sociales) donde te dicen: ‘si te tomas este tecito, ya con esto’ (interrumpes el embarazo). ¿Pero, qué ocasiona? Que muchas niñas mueran por eso. Porque no tienen la información necesaria”. Con este mural en la calle, agrega, se pone información confiable a la mano de las niñas y adolescentes que lo necesitan. “Ayuda a que no se sientan solas y sepan a dónde acudir”.
“Que el dibujo haya llegado a este punto no me lo imaginaba. Nos da mucha emoción. Nos sorprendió el resultado. A veces con decir: ‘a ver, vamos a intentarlo’ no pierdes nada (…) Nos inspira bastante a seguir adelante y a seguir con estos proyectos”, agregaron Ricardo y Ana Fernanda.