En el marco del Día Internacional de las Madres y Padres, la diputada Elsa Méndez Álvarez, presentó una iniciativa de ley de reforma constitucional con el propósito de que los padres ejerzan su derecho preferente a elegir la educación que recibirán sus hijos.
Recordó que la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas en septiembre del 2012 declarar el 1 de junio Día Mundial de las Madres y de los Padres, queriendo así reconocer su labor y honrar su trabajo en todo el mundo, y destacar su papel fundamental respecto a la responsabilidad de cuidar, proteger y educar a sus hijos.
“He presentado una iniciativa de ley que reforma y adiciona el artículo 4º de la Constitución Política del Estado de Libre y Soberano de Querétaro. Los padres tendrán el derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos, como un derecho humano, inalienable, imprescriptible y que no tiene negociación alguna como el Estado”.
Explicó que la Declaración Universal de los Derechos Humanos en su artículo 26, señala sobre el derecho a la educación gratuita en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental, además de que la educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia.
Y en el párrafo tercero establece que los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos.
“…otro punto importante como derecho es el carácter preferente y preponderante que tienen los padres sobre el derecho a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos. Este derecho de los padres a escoger es un derecho humano, inalienable, imprescriptible y tampoco es negociable con el estado. El estado debe ofrecer una educación sustentada en principios científicos…”.
La diputada local por el Partido Encuentro Social señaló que existe una necesidad de que los sistemas educativos no incurran en sesgos ideológicos y contenidos no aptos para los menores, de acuerdo a los criterios parentales familiares.