Diversos hechos empañan el proceso electoral en Querétaro.
Las descalificaiones y ataques sin fundamento son lo de menos.
Preocupantes son las provocaciones de mediocres actores segundones, que con un discurso desgastado buscan atraer reflectores.
Como igual lo son los ñoños seguidores de la envalentonada Abigail Arredondo, que portadores de playera blanca que en la espalda dice “Héctor”, o bien camisa roja que reza “Corregidora”.
Aún más las agresiones de pobladores bajo el influjo del alcohol contra opciones diversas a quienes los tienen maiceados.
Lo destacable, es que en todo lo anterior no se ve la mano de la administración estatal, como algunos quisieran.
Lo que podría resultar criticable, es que algunos panistas dan cobijo a verdaderos politiquillos mercenarios ni siquiera de café, sino de arrabal.
Vamos por partes.
En El Marqués “El Bananas”, Juan Aristeo Ramírez, cegado por la ambición política y sus complejos de inferioridad -ese tartamudeo perene- no le permite abandonar un discurso desfasado, provocador especialmente hacia las mujeres.
¿O con quiénes ha tenido altercados el expriista, regidor independiente, que se ha sometido al yugo de los alcaldes Rubén Galicia y Enrique Vega?
Hoy “Bananas” se rasga los mallones y lagrimea ataques a Morena, cuando el es ajeno a ese partido.
Mismo al que atacó y descalificó en la contienda pasada, cuando tenía esperanza de ser arropado por el manto azul de Enrique Vega Carriles.
Hoy, este personajillo que hizo negocios con Alejandro Ochoa Valencia, exalcalde de Colón hoy encarcelado, se ha sometido a otros dos mercaderes de la política: Guadalupe García Ramírez, que también despotricó contra Morena hace tres años, y por su cuñado, el experredista y expresidiario Gabriel “El Gavilán” Olvera.
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Por otro lado, la caterva de la envalentonada Abigail Arredondo está plagaa de bravuconcillos que por desquitar la paga de su ilusa candidatilla igual han entorpecido el trabajo reporteril en los debates entre candidatos a la gubernatura, que encarado a las huestes morenistas, buscando bulla.
Ni qué decir del lenguaje soez y falto de razonamiento de las otras cinco féminas que cumplen el papel para el cual las elijieron: atacar a quien le disputa la gubernatura a Mauricio Kuri González, la morenista Celia Maya García.
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La trifulca en la comunidad de La Valla, entre habitantes de la misma y el equipo de la morenista Celia Maya, se podría enmarcar el un ato irracional de fanatismo.
No se ve alguna mano detrás.
Quizá inoluntariamente, el alcalde con licencia Guillermo Vega Guerrero alimentó el actuar de unos cuantos.
¿De qué forma?
Tolerando el píllaje de unos cuantos.
Con la entrega indiscriminada de apoyos tales como láminas, tinacos y comales para estufas ecológicas.
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Problema azul es la recolección de cascajo y rémoras autoproclamadas de izquierda que con singular alegría y cohetones practican en el partido de ese color.
No aprenden.
Hace tres años le compraron espejitos y vidriod al PRD de Adolfo Camacho Esquivel, quien les prometió miles de votos, 20 mil, y apenas aportaron unos tres mil.
Hoy recojen algo más que desperdicios de la picaresca política.
Al tema me referiré en otra entrega.
Del asesinato de un integrante de la planilla de regidores de Movimiento Ciudadano en Landa de Matamoros, no hay nada que escribir.
Un problema de drogas.
Así, hay que amarrar esos perros que andan sueltos.